Investigadores del Hospital Gregorio Marañón, de Madrid, han descubierto y presentado la patente de una molécula que podría proteger al riñón del fallo renal.
La molécula podría comercializarse en dos años, en 2019, y se llama cilastatina. Este compuesto protege al riñón de otros fármacos agresivos. De esta forma se mejoran los tratamientos prescritos para el VIH, trasplantes, infecciones agudas o el cáncer.
Según los investigadores la molécula protege el riñón en un ochenta por ciento de los daños provocados por estos medicamentos. Es por ello que el uso de esta molécula podría permitir a los especialistas continuar con la administración del tratamiento de la enfermedad sin tener que interrumpirlo por un posible daño renal.
La molécula ha sido descubierta tras casi veinte años de investigación y según las previsiones se podrá administrar en pacientes en dos años.
Equipo ICUA