Los niveles elevados de testosterona suelen estar relacionados con mayor tasa de cáncer de próstata. Es precisamente por este motivo que en la actualidad muchas terapias se basan en la privación de esta hormona en el varón.
Un estudio reciente realizado por la Universidad de Medicina de Baltimore ha probado con exponer a las células cancerígenas a niveles altos de testosterona y a continuación, a niveles muy bajos.
Hasta el momento se pensaba que esta hormona reproducía el tumor de forma más rápida pero con esta nueva aplicación se han obtenido resultados diferentes.
Es por este motivo que se abre una nueva vía de tratamiento posible para el cáncer prostático en la que habrá que seguir investigando para tener más certezas científicas.
Si deseas conocer más sobre esta aplicación de la testosterona puedes acceder a la noticia en el siguiente enlace:
Equipo ICUA