Tres de cada diez varones mayores de sesenta años padecen disfunción eréctil en mayor o menor grado y uno de los motivos principales podrían ser los problemas cardiovasculares. Por tanto, los problemas de erección, además muestran un problema cardiovascular.
Tanto es así que las cifras según un estudio realizado por Johns Hopkins Medicine y publicado en JAMA Network Open asegura que la mayor parte de pacientes que acuden al especialista tras un episódio de disfunción eréctil, tienen algún problema coronario o incluso sufren un infarto a los dos o tres años.
La relacion existente entre este problema, con grandes connotaciones psicológicas, y la salud cardiovascular es indiscutible, convirtiéndose la disfunción eréctil en un síntoma de algo más grave y que nos alerta de un riesgo vascular asociado a la edad del varón.
Por otro lado, un estudio realizado a partir de búsquedas en el Excerpta Medica dataBASE (EMBASE) y MEDLINE por varios centros londinenses como el King’s College, ha intentado evaluar la prevalecía global de la difunción eréctil, su asociación con el envejecimiento y la enfermedad cardiovascular, la hiperplasia benigna y finalmente la demencia. En el mismo también se trató de averiguar cuáles son las discrepancias causadas por el uso de diferentes herramientas de detección de la disfunción.
Para realizar la investigación se utilizaron parámetros como el Indice Internacional de Función Eréctil y el Estudio sobre envejecimiento masculono de Massachusetts. La disfunción eréctil se relaciono directamente con el aumento de la edad así como con mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares. La prevalencia global de la enfermedad fue de 3-76,5 % y se pudo determinar que los pacientes con este problema contaban con mayor riesgo de mortalidad. Por otro lado, los pacientes con disfunción eréctil tienen entre 1,33 y 6,24 veces mas probabilidad de tener hiperplasia benigna de próstata y 1,68 veces más posibilidad de padecer demencia.
Este ultimo estudio pone de manifiesto las enormes discrepancias existentes en la detección de la disfunción eréctil asi como la necesidad de unificar criterios. Finalmente explican la necesidad de dotar a esta enfermedad de la importancia necesaria así como su tratamiento y examen exhaustivo para determinar si es un síntoma de una enfermedad coronaria.
Si deseas conocer este ultimo estudio, puedes hacerlo en el siguiente enlace:
Equipo ICUA